¿Quién es Patricia Sutherland autora?
Me resulta muy difícil separar lo que soy a nivel profesional de lo que soy como persona. Creo que uno lleva lo que es -sus valores, sus creencias, sus convicciones y sus motivaciones más profundas- a todas partes y que en eso consiste, precisamente, la vida plena; en lograr que una cosa vaya de la mano de la otra. Soy una persona tenaz, reservada, paciente, y muy reflexiva. Tengo una visión optimista de la vida y hago el esfuerzo consciente de buscar, en cada situación que me toca vivir, lo rescatable, lo útil. Estoy convencida de que lo que separa a una persona de sus objetivos es solamente la determinación con que se empeñe en conseguirlos y creo profundamente en la capacidad de cambio del ser humano. Todo esto se refleja en las historias que escribo, en la forma en que estoy llevando mi carrera literaria y también en la forma en que me relaciono con los demás habitantes del mundo literario... O eso es lo que espero :)
Mi estreno “oficial” en el mundo romántico español tuvo lugar en abril de 2011, de la mano de “Princesa”, una novela que aborda el controvertido asunto de la diferencia de edad en la pareja, y que me ha dado muchísimas satisfacciones, entre ellos un premio y la nominación a otro. También soy autora de la serie romántica Sintonías, compuesta por “Bombón” (2007), “Primer amor” (2007) y “Amigos del alma” (2008), de la que existe una edición formal (con ISBN) desde septiembre de 2012. Aparte de esto, soy una amante de los libros, la música, los animales y los viajes, que nació en una de las ciudades más bonitas del mundo, Buenos Aires, y recaló en Madrid, hace tres décadas... y aquí sigue :)
¿Cuándo te planteaste escribir comercialmente cuales eran tus expectativas?
Las mismas que ahora; construir una carrera seria basada en mi forma de entender el género romántico y el mundo del libro, y usar a modo de guía para no despistarme durante el camino, mi máxima aspiración; lograr que un día las lectoras que me siguen quieran leer mis nuevas novelas, independientemente del tema que traten, simplemente porque sepan que si una novela lleva mi firma, les dejará un buen sabor de boca.
¿Crees que has logrado tu objetivo en este medio?
Bueno, queda mucho por hacer, pero creo que voy bien encaminada. Estoy satisfecha con lo hecho hasta ahora.
¿Si tuvieras que elegir una autora actual, cuál sería?
¡Que difícil, Marisa! En romántica me quedan muchas autoras por leer, pero hasta el momento hay tres nombres que siguen imbatidos entre mis preferidos; las españolas Olivia Ardey (Dama de tréboles, Delicias y secretos en Manhattan y Bésame y vente conmigo) y Lydia Leyte (El fuego envuelve tu nombre y Los ojos del Bosque), y la norteamericana Suzanne Brockmann, autora entre otras, de la afamada serie de romance militar The Troubleshooters.
¿La eliges porque es buena escritora o porque tuvo éxito en ventas y promoción?
Las elijo porque, cada cual en su estilo, me cautivan. Consiguen mantenerme pegada a las páginas de principio a fin. Las consideraciones sobre calidad son territorio de los críticos literarios, y las del éxito de ventas, territorio de la editorial que ha publicado el título y de los medios de comunicación. Para los lectores, a la hora de la verdad, solo cuenta que si un libro nos atrapa o no, nos gusta o no.
Tus libros son contemporáneos
¿No piensas en incursionar en otros géneros como paranormal, erótica y homoerótica que están tan de moda?
¡Sí, claro! No sé si en todos los que mencionas, pero me gusta la idea de explorar otros subgéneros. Tengo escrita una paranormal y desarrollada la estructura de una segunda. No sé si algún día las publicaré. Por el momento, siguen en mi archivo hasta que tome una decisión sobre ellas. Tengo en mente una histórica que a ver cuándo puedo escribir. Erótica y homoerótica son, quizás, las que veo menos probables en estos momentos.
¿Qué opinas de éstos géneros y el despegue que han tenido en los últimos tiempos?
Soy de las que piensan que elegir entre cien es mejor que elegir entre diez y me encanta la idea de que el género romático sea diverso. A pesar de los acalorados debates en torno a calidad y otros asuntos que siempre conllevan los best-sellers, estoy convencida de que éxitos como la Saga Crepúsculo o la Trilogía 50 Sombras han acercado al género a muchísimas nuevas lectoras.
¿Qué opinión te merece la preferencia de los autores por la auto publicación y no tanto por la búsqueda de editorial?
Me parece un claro signo de que los tiempos están cambiando. Yo misma soy un ejemplo muy práctico. Tuve agente literaria durante casi dos años, un encanto de persona con más paciencia que un santo que me ha enseñado muchísimo. La contrapartida es que a través suyo pude conocer de cerca cómo funciona el mundo de la publicación convencional y eso que ví me gustó tanto que “me salí del sistema” y no quise volver a saber nada sobre el tema. El efecto fue así de contundente. Es cierto que cuando se trata de la autopublicación me cuesta ser objetiva porque me apasiona -es la horma de mi zapato y para mí no tiene aspectos negativos-, pero intentando ser imparcial diré que creo que se trata de un cambio positivo porque ofrece más opciones a los lectores, buenas alternativas de autogestión a los escritores e incluso le facilita las cosas a las editoriales, que ahora tienen la posibilidad de hacerse con títulos que ya han demostrado que funcionan bien como publicaciones de autor. En suma, ganamos todos.
¿Pensás que las editoriales son cada vez más difícil de llegar para el autor?
Al contrario. Siguen siendo difíciles las que siempre han sido difíciles -y por supuesto, me refiero a publicar en sus colecciones en papel, no en sus nuevos sellos digitales-; las dos o tres más importantes que, en mi opinión, son las que realmente tienen interés para un autor, profesionalmente hablando. Pero ahora hay muchas editoriales. Al menos en España, que es donde resido, es así. En realidad, nunca ha habido tantas editoriales dispuestas a publicar literatura romántica en castellano como ahora. No hace falta más que ver la cantidad de nuevas autoras que han aparecido en el firmamento romántico en los últimos cuatro años (de la mano de nuevas editoriales, o de editoriales que ya existían pero no publicaban el género romántico, o si lo hacían, era a través de la compra de los derechos de traducción al español de autoras norteamericanas o inglesas).
¿Tenés un proyecto nuevo, podes adelantarnos algo?
Hay varios proyectos sobre mi mesa, pero no soy muy proclive a irme de la lengua jajaja Lo único que te puedo confirmar es que mi próxima novela saldrá este año y que tendrá por protagonista a un motero llamado Brian “Evel” Rowley, un personaje que apareció en mi anterior novela, Princesa, como secundario y ha pegado tan fuerte que las lectoras han pedido verlo como protagonista de su propia novela.
Gracias por tu amabilidad y bienvenida a mi blog.
Muchísimas gracias a ti, Marisa, por invitarme a tu casita en Internet y permitirme llegar a tus lectoras.
Bombón:
Mandy y Jordan son amigos desde niños. Pudieron haber sido novios adolescentes, pero él no acudió a la cita. Ahora ella tiene 26 años, es una cantante famosa, y Jordan, además de su amigo, es su mánager.
Desde hace dos años, Mandy alimenta a la prensa sensacionalista con escándalos frecuentes y no atiende a razones. Una noche, Jordan la encuentra en su suite del hotel compartiendo cama con el licencioso vocalista de una banda de rock, y decide marcharse. Cuando Mandy quiere darse cuenta, Jordan se ha ido y su vida es un desastre.
Para Jordan, marcharse fue un intento de pasar página: cada vez más atrapado en la red de un amor no correspondido, ya no sabe qué hacer. Pero al tiempo, cuando vuelven a verse y Mandy se muestra arrepentida por lo ocurrido, y poco después reacciona tan mal al comprobar que él ha asistido con una amiga a la entrega de premios en la que Mandy es una de la nominadas, se enciende una pequeñísima luz de esperanza... ¿Son celos? ¿Qué posibilidades tiene de enamorar a esa mujer arisca que cambia de acompañante como de zapatos, cuya relación más larga duró apenas una semana?
Intentar olvidarla no resultó. Jordan decide que es hora de cambiar de estrategia...
Primer Amor:
Shannon O'Neil es lo que vulgarmente se llama una gordita simpática. Estudiante aplicada, editora del periódico del instituto y miembro activo de una importante ONG que trabaja con niños y adolescentes huérfanos, a sus 25 años es la asistente social más joven del Servicio de acogidas de Camden, Arkansas. Ha roto con su novio, trabaja mil horas por día, la báscula confirma que Papá Noel le ha regalado dos kilos por Navidad, y acaba de “heredar”, por jubilación de la oficial responsable, otro expediente de acogimiento.
En circunstancias normales, no le habría dado tanto importancia. Pero cuando reconoce el nombre en el impreso de solicitud, no se lo piensa dos veces e intenta por todos los medios librarse de aquel expediente: haría lo que fuera para evitar volver a verse las caras con su primer amor adolescente. Ese que cuando se dignó a quedar con ella, lo hizo solamente para ligar con su hermana...
Mark Brady, en cambio, es el típico “hombre 10”. Práctico, de ideas claras y seguro de sí mismo, con 30 años dirige el rancho agrícolo-ganadero más importante de la región. Soltero sin compromiso, se considera demasiado hombre para la oferta femenina actual por lo que sus esporádicas acompañantes suelen rondar los cuarenta. Es el mayor de tres hermanos, el más tradicional, el más familiar. Ahora, además, flamante padre de acogida...
Y recolector de calabazas: las que, incomprensiblemente, le está dando la preciosidad pelirroja que se presentó a la primera visita de control, como la nueva asistente social a cargo de los hermanitos White.
Amigos del Alma:
“... Cuando le preguntaron a Jason Brady, el flamante entrenador de Los Tigres de Arkansas, si consideraba que haber conseguido ensamblar un gran equipo en tiempo récord y mantenerlo en buena posición, a pesar de la plaga de lesiones que sufren desde el primer partido, era el logro más difícil de su vida, él respondió con su sonrisa seductora y su talante de ganador: “no, hombre... Mi logro más difícil fue que mi chica me dijera que sí”. Cuentan que la sala de prensa estalló en carcajadas. Además de su gran sentido del humor, hasta los cronistas hombres reconocen que no es del tipo al que las mujeres le dicen “no”. Pensaron que había sido una broma, una al mejor estilo Jason Brady.
Todas las personas con las que he hablado coinciden en una cosa: Jason y Gillian son como dos gotas de agua (...) pero lo que los distingue de otras grandes amistades es que, al parecer, mantienen una especie de conexión mágica que los fortalece y los complementa, y que es un atributo exclusivo de las almas gemelas.
¿Cómo pasan dos personas de ser carne y uña, los mejores amigos durante más de una década, a convertirse en pareja sentimental?
¿Qué circunstancia tan especial, nueva y determinante puede llevar a dos personas que han mantenido un nivel de comunicación tan profundo, a estrechar lazos?
Bueno, lo que el entrenador Brady dejó claro con su comentario en la sala de prensa es que a) no fue fácil, b) no fue sincronizado, y c) fue él quien puso el balón en movimiento...”
Princesa:
Theresa "Tess" Gibb es una inglesa culta e independiente que vive en Estados Unidos desde hace quince años. La editorial para la que trabaja en Boston, acaba de nombrarla editora de una colección de la que se hará cargo tan pronto regrese de Londres, de visitar a los suyos.
Pero lo que prometía ser poco más que unas cortas vacaciones en familia, se convierte en un viaje que transformará completamente su vida cuando recuerdos del pasado se entremezclan con la familiaridad del entorno, y Tess se da cuenta de que lleva años echándolo en falta.
Todo continua igual que en sus recuerdos, entrañable y a la vez, irremediablemente pasado: su familia, su casa, su barrio, su hermana -eternamente enamorada del vecino de al lado-...
Todo excepto él, Dakota, el vecino de al lado, un anti-héroe por el que Tess se siente inexplicablemente atraída a pesar de ser el amor platónico de su hermana...
Y de ser once años mayor que él.
Princesa, una novela de Patricia Sutherland sobre el amor y la diferencia de edad.
¡Ha quedado preciosa, Marisa! Muchísimas gracias por tu interés en mí, y por permitirme llegar a tus lectoras a través de una entrevista que me ha hecho muchísima ilusión, ya que ha sido un poquito como volver a mi tierra.
ResponderBorrarUn abrazo desde Madrid.
Patricia